¿La muerte de Diana no fue una conspiración sino simplemente una tragedia? Le pregunto a los encubridores de las conspiraciones, esto es, encubridores

de los peores delitos, no ya por a quiénes se mata, sino desde dónde se mata.
Y no porque lo ratifique Nosta-Damo con su cuarteta, que prometo subir cuando extraiga de mis papeles, cuarteta en la que habla en términos de lo más esclarecedores de la reina madre, aunque para mí que debió hacerlo también del hijo. ¡¿Tragedia?! Vuelvo a preguntar con indignación a estos profesionales del diplomático encubrimiento, natural Maquiavelo o rastrero de los informadores que mucho darse humos de "periodismo de investigación", cuando más venenoso o cenagoso que el rosa o amarillo, mucho darse humos de eso, "periodismo de investigación" subvencionado en todas las ocasiones con "mi dinero" (expresión figurativa para decir que paga el dinero de todos nosotros, los primos, los saqueados por todas las recaudaciones del estado y otras mafias hasta que ya no tienen de dónde, suelen encima, dado lo ineptos, matar sus gallinitas de los huevos de oros en todos los períodos históricos, de ello mismo hay "períodos") ¡Y subvencionado con mi dinero ¿y encima tienen la osadía de mentirme tan descaradamente?!
¿Fue una tragedia? Tragodio, tragodio, el de la madre real y el de la rana principito orejas soplillo, ese sí que fue odio, no tragedia, o sí: la tragedia que representaría para Diana el que decidiesen aplastar como a guiñapo su vida, las "consideraciones de estado" = "consideraciones de real estatus" = "servicios de inteligencia siempre tan criminales, pues torpes, o al revés" (cual el sodomita FBI que aniquilase a la Monroe, Martin Luther y los hermanos Kennedy) = "grandes negocios, todos realizados siempre desde las armas o para las armas, o con las armas en la mano, como prefieran" (Recuérdese la campaña contra las minas por la que recibiese amenazas de futuro "accidente". ¡Y no están muy lejos los servicios secretos de todas las naciones de esas amenazas de "futuro accidente" dicha a los que se atrevan a socavar los presentes, y menos futuros, ingresos, de los jefes de ellos, o colaboradores de sus jefes, no crean que verteré idea alguna que me añada a esa hez de los "encubridores de conspiraciones", "periodismo" ¿de investigación?!)
(Ladino sistema de archivado, por el rabillo del ojo te vigilo desde que empecé esta nota: No estás archivando, no te creas que no me percaté, por eso voy guardando yo, no sea que se te antoje hacerme desaparecer el trabajo al modo de que a Diana la desapareciesen; y luego éste no es un mundo de conspiraciones... cual aseveran los "periodismos" ¿de investigaciones?, paga el dinero de todos en manos de los jefes para los cuales ellos "investigan")
1972, primer agujero negro descubierto --Esto es historia de la ciencia-- cuando la muerte de mi particular princesita, Alejandra Pizarnik, entre todos la mataron y ella sola se suicidó de 50 seconalazos, la muy... Romeo... o Julieta, cual ella prefiriese representar, please; 1997, Diana, ¡qué tragedia!, GRANDÍSIMA, TODO SEA POR LO NECIA ASESINA, CONSPIRACIÓN. Y antes: 1962, nadie demandó por ello a J. Edgar Hoover, pobre Marilyn, sodomizada por los seconalazos, u otros barbitúricos, herramientas asesinas de criminales psiquiatras, de la mano del digno sospechoso de esa "sodomización"-mortal, fijaos si arma asesina propia del gran mariconazo degenerado, asesino en suma, que fue con toda seguridad el delincuente jefe supremo, ¿por tanto?, de la policía, Hoover.