Mi muy PALABRAMADÍSIMA(S) PIERNAS Y TODO LO DEMÁS CACHO ESPÍRITU ALEJANDRÍSIMO, NO POR ELLO MENOS PIERNAS

Aquí vengo mi muy Amada a de nuevo hablarte como se escribe, o al palíndromo dábale la... ¿zorra?, ¡¿y quién dijo zorra?!, al abad no veas la de palos, ESCRIBIRTE COMO SE HABLA, COMO SE ES EL ALMA:
Esta vez, como ya todas las de mi vida, no creo que mucha, vida ésta, si esta mismísima mierda puede ser por vida conocida, aun se empeñe la zoquetez titulada en biológicas; esta vez a levantar puñales, como ya me enseñases en sueños allá por los años setenta cuando te murieran como a tantos otros genocidiasen, o a ¡tantísimas otras!, yo, nos silenciaran de por vida, bien lo sabe Vos que a la hora de mi muerte viene a presentarse también eludiendo las represalias del primer terrorista, esa cosa, ni se sabe lo que es, yo no lo sabo, ni creo que las almas del otro mundo tampoco lo sepan, por "dios" conocida, o como cucaracha sentida... no sólo por Kafka mi muy Amada, como habrás podido ver, además de que lo constatases en tu propia persona.
Alzando puñales y cantando con la música de otra, una tal Lorena (Mackennit) de aquí, verso o frase aplicable a todas las líneas musicales de su canción "The Lady of Shalot":
Sociedades de criminales gusarapos
conocidas por democracias
Amenazo a todos cuantos de literatura de la auténtica incluido el tribunal (con minúscula) constitucional (con minúscula)
constitución con minúscula, no sólo la hispánica, paneuropea. Del mismo modo nos masacrarán... ¿O no? En las democracias es únicamente tras explotarnos, gente al mando de mucha enjundia mental; los dictatoriales son tan incompetentes que olvidan sus sagrados intereses económicos ante el frotarse las manos del panem et circenses.

Pero aquí vine mi más que Palabramadísima, a decir el pico de enterrador que es tu lengua de muerta sobre mi esquelética estructura:
Hasta los huesos de todo el esqueleto y de la nuca, tu voz me yere, araña, raspa, como si fuese yo la muerte y vos la resucitadora.
¡Resucitáme mi cacho de Bosta hasta decir basta!,
o dejo de ser Bosta, la que había muerto pues no tenía mujer...
¡O! Pobre Bosta, le daban el pésame al marido pensando que la que había muerto era ella y no el muerto, precisamente el que era objeto de obtención de pésame... quedarse así sin su Bosta.