"La rebelión es mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos" Alejandra Pizarnik-en esta vida

"Solo veo rosas" Alejandra Pizarnik-más allá de esta vida-

Solo soy pura rebelión, vino a decir... aunque no sola estás

Vos no está sola. Y esta rebelión se hará. Y no desde la soledad. No desde cuatro gatos somos y por eso nos pisotean. ¡Una ola de Rebelión vendrá que tambaleará los cimientos podridos de estas sociedades!






jueves, febrero 22, 2007

Su rostro está en mí, lo siento en mis nervios, flota en mis ojos

(junio 1962)
Si no me muero demasiado pronto, escribiré la historia del rostro que llevo en mis entrañas dibujado.
El rostro que llevabas en las entrañas dibujado ni tú sabías que era yo; pero ya que lo sabes, o ¿por qué te apareces?, ¿pretendes que la escriba yo: HISTORIA DEL ROSTRO QUE LLEVO EN LAS ENTRAÑAS DIBUJADO? No hubiese estado nada mal como invento psiquiátrico psicológico que pudo salvar tantas vidas, que se hubiese proporcionado lápiz y papel a todos desde chicos para que fuesen trazando cada día con un nuevo rasgo el rostro de las entrañas, esa honda preferencia sexual reprimida por todas las sociedades y sus psiquiatrías, a pesar de sus sexos anales y otros descubrimientos de lo que estuvo siempre ahí y pareciera que sólo Colón, o mejor, Américo Vespucio que le sacó más tajada a eso de las Américas dado que llevan su nombre, se aprovechó del trabajo de Viki el vikingo y otros mesopotámicos que no sólo circunnavegaron Africa sino que se fueron dando un paseíto hasta las Américas, allá por el sur, que es precisamente donde las civilizaciones más antiguas de ese continente se encuentran. Pero eso habría querido decir que las mujeres de todo tiempo hubiesen recibido su lapicerito para trazar el rostro de las entrañas de ellas, ¡¿y dónde la muñeca hinchable, la burra del establo donde introducirla sin contemplaciones sin higiene y sin preguntarle si daba o no su consentimiento la ¿para algo interesada en esas prácticas, sobre y dentro de su propio organismo, conducentes a su preñez y parto en el establo te mate una septicemia?!
Su rostro está en mí, lo siento en mis nervios, flota en mis ojos... Rostro en las entrañas dibujado, con una claridad más meridiana que toda esa estafa de los hijos, vientre de la burra para parirle la mano de obra a toda gratuidad al páter famillias. He ahí los dos platillos de la balanza de la sala de Maat o del Juicio: El rostro en las entrañas; y el hijo parido desde vientre de burra. ¿De parte de cuál platillo estará Maat la Máter Mundi?
Contestete Vos o le rompo a preguntancias los tímpanos a éstos.
EL ROSTRO EN LAS ENTRAÑAS: Él sí es un hallazgo psicológico, filosófico, sociológico de primera fila, amén de artístico romántico y etc. de literario y no los ewig weiblich, eternos femeninos de otros; etc. de literario y de todas las vísceras resumidas en el vocablo entrañas, ¡sentrañas mías! ¡Tú convertida así en mi rostro en las entrañas, introduciéndote cual dios por mi nariz!, tú introducida en mi corazón, Amor.

Grupo poético de Sombra & Sombra Dentro de mí con ella que es yo