Un rostro de mujer --- Mirar el Greco de la pared colgado

Mirar el Greco de la pared colgado

o mirar tu retrato...
Es tan triste
esto de contemplar tu rostro en papel fotográfico.
Me pone el melancólico subido
que a ese lienzo el pincel,
que la tormenta a tu paisaje vasco;
y me acuerdo de tu flor preferida
virgen-patrona de tu tierra natal
y lloro-escribo un nombre en el papel...
¡Cuando quisiera tener tu rostro entre mis manos
y cubrirlo de besos,
begonias!,
no de lágrimas este pálido Greco
con un misterio dentro
que se agranda alargándolo.

Mis lágrimas, tu rostro.
Todo lo que es un misterio es una estafa,
todo lo que tiene que permanecer oculto.
¡Nos estafan la vida con esta ocultación,
lo hace la sociedad, lo hace su Dios de mierda,
dioses de mierda, poder de mierda,
dinero mierda, su natural corrupto,
heterosexualidad corrupta,
sucia y criminal heterosexualidad,
sucia, sucia,
necia,
macho!
¡Se nos obliga a ser como no somos,
nos roban la juventud la vida,
nos fuerzan a vivir lo no querido!

....Es mejor no escribir.
¿Qué explican las palabras?
¿Qué aclaran?
Si las verdaderas han de silenciarse,
no decirse,
si sólo se pronuncian las falsas,
las impuestas,
¡las impuestas por una sociedá macho-heterosexual
criminal, criminal,
que jamás pagará en la misma medida que el daño causado
... a tantos!
Si las balas solucionaran esto......

Esta maldición llena de verdad hacia toda la corrupta heterosexualidad, casi toda, sobre todo si macho, aun en estos días tan liberales, ¿liberales, o sucios corruptos necios como aquí explico?, fue escrita a finales de los años setenta