"Me doy por aludida o me picará el ajo, o las moscas pican". -¡Haya paz entre los ruines! Terció Cervantes... Desde la cátedra que le dio la vida,

o él dio vida a la cátedra.

Si entre nosotros discutimos queridos discípulos, se dirá lo que Cristo de Satanás: Su reino no prevalece. De lo dividido en taifas como el califato de Córdoba que hizo del califa gatos un tigre que habia sido (Odio citarme, pero viene a cuento)

Y me parece ver que mueves tu cabeza en desaprobación mi aventajado Juanillo que más pareces Pedro de lo a la cabeza que te pusiste tras tu ictus parusístico (No se diga que los tocados por el ictus no nos volvemos genios, o su retruécano: que los tocados por el ictus no lo fuimos por lo genios) Que no te parece que tú, o sea Cristo, aunque fuese desde lo desmemoriado de otra vida, dijeras eso sino más bien lo contrario: -De la unión hace la fuerza de Satán, si quieren compararlo con mi padre, como hace Carmen, o sea yo, son muy libres, su reino prevalece; y por ello, por ello sois vosotros, pelados que me oís, unos lilas disminuidos de vuestra realeza. Haced lo que esta mujer de nombre de blog tan admirable: Volviendo realeza a la humanidad. No os dejéis escupitinajear el copete vuelto corona de espinas por el apodo "de locos", "de rey de los judíos", "de rey o reinona homosexual", sino que devolved el eructo o escupitajo a todas las tiaras o atributos de mando que montan, ellos sí montan, cuantas charadas peor que socarronas, pues que burlas sangrantes no encubiertas en sus consecuencias, pero sí en cuanto al propósito o la inhumana descategoría del sangrante burlador, tantos. Y sobre todo aquí.

Bien, pues has terminado de realizarme la entrada tú aventajadísimo discípulo que en maestro te nos convertiste. Y eso que sólo estaba adivinándote, que por empatía me puse en tu lugar y peroré por ti, sino me escribes la entrada entera.

Ya, ya sé que hay paz entre chocho pelocho, como tú le apodas por palabrotero él, ¡o por tan Real Academia de la Lengua más Real!, y tú. ¡Ah! Si supieras el apodo que él te puso... Lo tomarías de bandera y hasta cambiarías el nombre que le pusiste a tu blog por él.

Solicítamelo por email, no tentemos antes de tiempo a los émulos.
¡¡Solicítamelo por email en tanto que nuestra bien conocida intimidad no te haya hecho olvidarlo!! También puedes solicitármelo de lo más públicamente aquí haciéndote la sueca.

¡¡Comenta querida, o solicítame el email así, que blog que se precie vive de sus comentarios!! Aunque para nada de lo que haya vertido en él.

¿Y pronto nos cerrarán o cerraremos si no nos comentamos, índice de audiencia?

CUÁNTOS ÍNDICES. Y únicamente decían el de la santa inquisición, santo y eterno padre estado, tanto en democracia o no, tanto en dándote un tiro en la nuca o el corazón o haciendo que caigan tus índices de audiencia, esto es retirándote tu derecho a publicar si tienes algo que decir por el método que fuere, que vale todo tanto en democracia en dictadura como en amor como en guerra.